Aprobé mi título de pastelería viviendo en la calle… ¡listo para nuevas aventuras!

JMe llamo Patrick. Llevo tres meses viviendo en un piso de Lázaro, después de pasar seis años intermitentemente en la calle. Soy pastelero de formación. He viajado bastante y he tenido varias decepciones profesionales. Viví cinco años en Irlanda, trabajando en una pastelería. Luego sentí nostalgia de mi país y decidí volver a Francia: tomé el avión más barato que encontré (9 euros) y me fui a Narbona para intentar encontrar trabajo.

Soy pastelero polivalente, con casi 20 años de experiencia, pero no tenía el título oficial (CAP).

Me inscribí como candidato libre mientras vivía en la calle, cuando ni siquiera tenía los utensilios necesarios

El centro de examen me prestó algunos, advirtiéndome: «Si no lo apruebas, no digas que fue por culpa de las herramientas».

¡Y lo conseguí! Fue un orgullo enorme. Mi trabajo es mi pasión: me levanto con una sonrisa para trabajar, me gusta tanto lo que hago que tengo la impresión de estar de vacaciones. El amor por este oficio me lo transmitieron cuando hice mi aprendizaje a los 16 años, y desde entonces quiero ser relevo de esa pasión. Creo en mi estrella y pienso de verdad que a las buenas personas les acaban pasando cosas buenas. Por eso, incluso en los peores momentos, siempre mantuve la esperanza de encontrar mi lugar en la sociedad… y nunca perdí la sonrisa.

En Francia te estigmatizan muy rápido cuando dices que vives en la calle. Yo siempre esperé encontrar un entorno sano para reconstruirme. No soy de los que se imponen ni quieren molestar; al final terminé por cerrarme en mí mismo, aunque en el fondo soy de Aix y estoy acostumbrado a hablar con todo el mundo. Probé suerte con Lázaro, pero con el COVID no esperaba que me respondieran. Me decía: «quizá haya personas que lo necesiten más que yo». Después pensé: «si hay sitio para los demás, ¿por qué no para mí?». ¡No podéis imaginar lo feliz que fui cuando me dijeron que sí! Al hablar por teléfono con Éric, enseguida conectamos: sentí que había algo en él que se parecía mucho a mí.

Lo que más me gusta de Lázaro es tener proyectos en común, pasar tiempo juntos.

No hice el servicio militar, pero dicen que es allí donde se hacen los mejores amigos. Aquí siento que recupero ese tiempo: compartimos momentos, actividades… Eso es lo que me permite romper la soledad. Uno puede estar rodeado y sentirse solo por dentro, pero aquí me siento bien, estoy en mi elemento. Hago mucha pastelería para mis compañeros de piso, y así aprovecho para probar cosas nuevas. Ahora vuelvo a tener proyectos: quiero encontrar un trabajo en pastelería en Nantes. Dejo currículums todas las mañanas, ¡sigo luchando!

Únete a nosotros

Hogar de El Puerto de Santa María

Puede ponerse en contacto directamente con los administradores del hogar

Hogar de El Puerto de Santa María


Hogar de Madrid

Hombres

8

Mujeres

7

Estudios

2

Puede ponerse en contacto directamente con los administradores del hogar

Inés y Jorge

madrid1@fundacionlazaro.es
Calle de Luis Larrainza, 46a, Chamartín, 28002 Madrid

Hogar de Barcelona

8

Mujeres

10

Hombres

1

Estudio

Puede ponerse en contacto directamente con los administradores del hogar

Aurora y Andrés

barcelona1@fundacionlazaro.es
Carrer de Mercè Rodoreda, 7